martes, 19 de julio de 2011

Jornada de formación política

El pasado sábado 16 tuvo lugar la segunda charla de formación en el local de La Cámpora Caballito (Parral 118). La misma, tal lo ocurrido con la primera, estuvo a cargo del profesor Guillermo Batista (padre del compañero candidato a comunero Lautaro). En esta oportunidad se abordaron los sucesos del 17 de octubre del 45: quiénes fueron los verdaderos protagonistas de aquella gesta, de dónde surgieron, cuál era su impronta cultural… Se desmitificaron algunos lugares comunes (como atribuirle al peronismo una masiva migración interna y en consecuencia la radicación de las primeras villas miserias, el carácter espontáneo de aquella movilización obrera, la declinación económica del 55), y se trazaron lineamientos acerca del ser constitutivo del peronista, desligando el aspecto económico como principal fuente de adhesión y, en cambio, resaltando la dignificación que el obrero percibió a partir de 1945 con las políticas implementadas desde la Secretaría de Trabajo (ni siquiera tenía aún ese rango) por el entonces ignoto coronel Perón. Esa raíz fundamental que hizo que los trabajadores empezaran, por primera vez en la historia, a sentir que eran personas con derechos similares a los que hasta allí detentaron el poder. Los grasas (mamelucos de talleres engrasados), mutaron la vergüenza que sentían al ser sojuzgados por la oligarquía terrateniente por el orgullo que les insufló Evita al reconocerlos como agentes irremplazables del movimiento. Y la forma en que ese legado atravesó las proscripciones, prohibiciones y represiones más cruentas -resistencia peronista de por medio-, para trasvasarse de generación en generación.
Mientras circulaba el mate de mano en mano se expusieron los dos modelos antagónicos que históricamente confrontaron en nuestro país: el de Rivadavia frente al de los próceres de mayo, el de Mitre, Sarmiento y Roca frente al de San Martín, Rosas y Perón. Se resaltó la visibilización que el actual gobierno hizo de la gesta de la Vuelta de Obligado, de la importancia que cobran emprendimientos como Tecnópolis, (se recuerda a Cavallo mandando a los científicos a lavar los platos), como gestos intrínsecos del ideario peronista.
Es de resaltar la participación de los presentes produciéndose, por momentos, jugosas disgresiones que disparaban el diálogo hacia otros tópicos complementarios e igualmente sustanciosos.




A eso de las seis y media se dio por finalizada la charla y los compañeros se dirigieron a ver el partido por cuartos de Copa América entre Argentina y Uruguay. Pero de ese evento lo más prudente es guardar debido silencio.

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